La Tomatina podría cobrar una entrada simbólica para conseguir respaldo económico y limitar el aforo por cuestiones de seguridad

El Ayuntamiento de Buñol estudia cobrar la entrada por asistir a la Tomatina. El objetivo es garantizar la supervivencia económica de la fiesta y limitar el aforo por seguridad.

Los precios que se barajan es cobrar una entrada de 5 o 10 euros. Un precio simbólico para que la Tomatina siga siendo un evento popular pero también para que ayude a financiar el festejo, que este año ha contado con 50.000 participantes y necesita también un respaldo económico.

Por otra parte, desde Buñol también se está en trámites de exportar esta fiesta a Corea del Sur y realizar allí el próximo año una Tomatina.